Asilo
Estados Unidos brinda asilo a las personas que necesitan protección contra la persecución. Aquellos que buscan refugio desde fuera de los EE. UU. generalmente se clasifican como refugiados, mientras que aquellos que buscan protección desde dentro del país se denominan solicitantes de asilo. El asilo en los Estados Unidos depende del cumplimiento de dos requisitos específicos. En primer lugar, los solicitantes de asilo deben estar físicamente presentes dentro de los Estados Unidos. En segundo lugar, deben demostrar que han sufrido persecución en sus países de origen debido a al menos uno de los cinco motivos protegidos.
Raza.
Religión.
Nacionalidad.
Opinión política.
Pertenencia a un determinado grupo social.
Además, un número creciente de casos de violencia doméstica han pasado a primer plano, y los solicitantes de asilo a menudo sufren las cicatrices psicológicas del trauma, lo que resulta en condiciones psiquiátricas como el trastorno de estrés postraumático (TEPT), el trastorno depresivo mayor (TDM), el trastorno de ansiedad generalizada (TAG) y los ataques de pánico. Una evaluación psicológica completa es fundamental para dilucidar las ramificaciones de salud mental del abuso o la persecución sufrida, y también ayuda a evaluar cómo estas experiencias traumáticas pueden seguir afectando al individuo en el futuro.
Aprende Más
Psicología de la inmigración y su rol en el proceso de Asilo a los Estados Unidos
Los psicólogos de inmigración desempeñan un papel crucial en apoyar a los solicitantes de asilo y ayudar a los abogados de inmigración a construir casos sólidos. A continuación se presentan algunas de las maneras en que puede ayudar:
Evaluación de la credibilidad:
Realizar entrevistas clínicas para evaluar la credibilidad de las historias de los solicitantes de asilo.
Identificar y documentar los síntomas de trauma que sean consistentes con las experiencias de persecución.
Evaluar la capacidad del solicitante para narrar su historia de manera consistente y creíble.
Preparación para la entrevista de asilo:
Ayudar al solicitante a prepararse para la entrevista de asilo.
Practicar responder preguntas difíciles.
Enseñar al solicitante técnicas de afrontamiento para manejar la ansiedad.
Colaboración con abogados de inmigración:
Proporcionar informes detallados de las evaluaciones psicológicas a los abogados.
Explicar los hallazgos de la evaluación y cómo se relacionan con los requisitos legales para el asilo.
Colaborar con los abogados de inmigración para desarrollar una estrategia legal convincente.
Testimonio en la corte:
Testificar en la corte como experto en salud mental sobre los efectos del trauma y la persecución.
Explicar cómo las experiencias del solicitante han impactado su salud mental y bienestar.
Responder a las preguntas del juez y los abogados sobre la evaluación psicológica.
Otras formas de ayudar:
Ofrecer terapia individual y grupal a los solicitantes de asilo.
Brindar educación sobre el trauma y la persecución a los abogados de inmigración.